Houston tenemos un problema.
viernes, 22 de enero de 2010
Estoy aquí a tu lado. ¿A que huelen los campos? ¿Y la tierra mojada en primavera? ¿Qué se siente cuando el sol te descubre bajo su reino y te palpa? ¿Qué sentirá el sol al vernos bajo sus pies? A ti sí que te ve. ¿Me vera a mi? Quiero pensar que si me ve. Aunque no lo percibo. Desconozco del día y de la noche. Todos aquí habitando, así, desenfrenados, enloquecidos con vuestros problemas. Me gustaría sentarme de la misma forma que estás tú ahora. Observar las cosas con la intensidad que las observas. Implicándote de esa forma tan vibrante. Te observo y sigo viéndote niño. Eras bebe y antes de gatear, intuías que ibas a conseguir gatear. Antes de un paso y caminar, intuías que en cualquier momento se produciría ese hecho. Antes de una palabra, ya oías y escuchabas a tus semejantes ¡sí! Siempre tú adelantándote a todo, celebrando no el logro conseguido sino el siguiente reto por conquistar.
Aún así, ahora te veo anticipado, envuelto en ese almacén de ideas. Me pregunto millones de veces ¿Cómo lo haces? ¿Cómo ordenas dentro de tu ser tantas y tantas ideas? Dibujas esa media sonrisa, que dudo si es un dibujo o de verdad siempre tienes esa expresión en la cara.
No quería aceptar este trabajo. Soy nuevo. La verdad más que nuevo, soy recién estrenado. Me asusto fácil y no creo que sea el más indicado para desempeñar esta labor. Pero… me ha tocado a mí. Tampoco comprendo porque te digo esto, no quiero que sea una disculpa o un pretexto por si sale mal. A veces intuyo que sabes de mi presencia. Otras no, estas visiblemente concentrado y ocupado en tus tareas. No intento comunicarme contigo porque tengo la certeza que no oyes a nadie.
El orden natural de las cosas. ¿Qué significa esta frase? El orden natural… significa que el día que perezcas inexorable, yo perezco contigo. ¿Sera? Es absurdo pensar que esta maquinaria perfecta de una creación y diseño colosal, ante mi presencia. Mi habitar en ella como si de un pequeñísimo huésped se tratase pudiese destruirla…
¿Por qué pensare algo tan absurdo? Es imposible que algo así ocurriese. Materiales de primerísima calidad, estas cañerías, paredes… quien te creo, no escatimo en fuerzas, recursos y tiempo. Creo que podemos vivir juntos y ayudarnos. El orden natural de las cosas, creo que es eso. Poder vivir sin dañarnos los unos a los otros.
*Mensaje telepático de un tumor cancerígeno a un cuerpo de un varón europeo durante una sesión de radioterapia dos semanas antes de fallecer ambos.
